Increíble experiencia. En la celebración del cumpleaños de mi madre, Maribel nos ha hecho sentir mejor que en casa. Super atenta, super amable, un encanto de mujer! El sitio es precioso y lo tiene super cuidado. El desayuno completísimo. Por poner un pequeño pero: los colchones son algo incómodos. Aún así no empañan un fin de semana de 10. Lo recomiendo absolutamente.

Nos alojamos allí en nuestra noche de bodas. Recibimos un trato estupendo y muy cercano por parte de la dueña, lo cual agradezco especialmente porque reservamos con muy poco tiempo e hicieron lo imposible para acomodarnos. Lo único que se echa en falta es un cartel con el horario del desayuno, que es a partir de las 9:30, pero la tortilla de patatas es exquisita y el desayuno muy completo.

La atención de Maribel fue excelente, con personas tan amables, cariñosas y atentas da gusto. Además, las recomendaciones que nos hizo nos encantaron. En el desayuno no faltaba de nada (mención especial para el pan) y se preocupó de que hubiera opciones sin gluten (como unas rosquillas buenísimas). La habitación era muy acogedora, así como la propia casa, cerca de la calle principal de Rascafría donde están la mayoría de bares y restaurantes.

Hotel rural tranquilo y agradable para parejas. La propietaria Maribel, un encanto de señora.

Es un hotel con mucho encanto. Pero lo realmente excepcional es su propietaria Maribel muchas gracias por todas las facilidades que nos diste tu apoyo y ayuda nos ayudo muchísimo en la antesala de.nuestra boda. Si queréis pasar unos días de descanso y paz en la zona de Rascafria este es vuestro hotel

Estuvimos un grupo de amigos en el hostal de Maribel durante un fin de semana y descatamos sobretodo la amabilidad de Maribel que es un encanto y los desayunos que eran muy variados y todo muy rico. El hostal es sencillo pero acogedor

Un lugar entrañable, céntrico y sobre todo muy limpio y bien atendido.

Hemos estado este fin de semana en grupo y todo maravilloso pero sobre todo Maribel que es un amor de persona 100%recomendable.

Pasamos dos noches por una boda en este alojamiento, el trato fue muy cercano y familiar, las instalaciones impolutas. Volveremos seguro para recorrer la naturaleza cercana.

Cogimos la reserva desde hace más de un año, y desde entonces con Maribel todo han sido facilidades. Si tengo que volver a esta zona, no dudó en repetir. Muy recomendable