4/5 Pepe G. 4 years ago on Google
(Translated
by
Google)
Bar
Los
Navarros,
which
is
located
in
the
most
traditional
district
of
the
city,
or
"cool"
as
some
would
say
esnob-;
in
which
the
permanent
holiday
feeling
they
give
the
many
bars
and
restaurants
which
contribute
to
its
busy
streets.
A
Ruzafa,
Fallas
tradition
has
given
his
reputation
as
a
must-see
attraction
for
locals
and
foreigners,
and,
at
present,
the
phenomenon
of
gentrification
has
become
more
expensive
spaces
allowing
the
rehabilitation
of
many
houses,
retaining
the
facades
of
modernist
style.
However,
this
constant
celebration
or
revelry
results
in
a
less
friendly
face:
the
area
residents
hardly
find
peace
and
tranquility,
and
such
party
reaches
uncomfortable,
except
prove
that
mimic
the
environment.
Los
Navarros
variety
for
lunch
is
no
big
deal,
however,
the
quality
of
its
products
allows
you
to
enjoy
a
generous
sandwich,
both
in
size
and
content
of
the
Entrepan.
White
and
black
with
peppers,
baby
squid
with
beans
and
ali
i
oli,
potato
omelette
...
among
other
products,
can
get
a
powerful
esmorzaret.
The
small
enclosure
at
this
establishment
plays
host
to
many
diners.
In
a
local
of
a
certain
age,
whose
ruler
has
inherited
to
the
name
of
the
previous
owner,
vintage
objects
are
preserved;
those
who
can
now
only
find
in
a
museum
of
arts
and
folk
customs
or
grandma's
house.
Stacked
on
shelves
or
racks;
we
can
see
without
art
or
music
concert;
Scrambled
including
books,
bottles
and
other
useless
objects:
radios
of
the
thirties,
old
cash
registers,
sewing
machines,
old
fans
blades
...
and
everything,
throwing
in
missing
the
absence
of
the
duster
or
cloth;
covered
with
dust
and
cobwebs,
causing
the
feeling
that
they
were
in
an
attic
or
storage
room.
Striking
a
machine
as
a
tank
or
pump
pressure
anchored
to
the
wall,
which
once
served
to
produce
sparkling
water
and,
according
to
the
waitress
said,
it
is
still
used
today.
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Buidaolles
(Original)
el
Bar
Los
Navarros,
que
está
situado
en
el
barrio
más
castizo
de
la
ciudad
–o
más
«cool»
como
diría
algún
esnob-;
en
el
que
la
sensación
de
fiesta
permanente
se
la
dan
los
numerosos
bares
y
restaurantes
que
concurren
en
sus
bulliciosas
calles.
A
Ruzafa,
la
tradición
fallera
le
ha
dado
su
fama
como
un
lugar
de
visita
obligada
para
propios
y
extraños,
y,
en
la
actualidad,
el
fenómeno
de
gentrificación
ha
encarecido
los
espacios
permitiendo
la
rehabilitación
de
muchas
viviendas,
conservando
sus
fachadas
de
estilo
modernista.
Sin
embargo,
esta
constante
celebración
o
jolgorio
tiene
como
consecuencia
otra
cara
menos
amable:
los
residentes
en
la
zona
difícilmente
encuentran
la
paz
y
la
tranquilidad,
y
tanta
fiesta
llega
a
resultar
incómoda,
salvo
que
se
mimeticen
con
el
ambiente.
En
Los
Navarros
la
variedad
para
el
almuerzo
no
es
gran
cosa,
no
obstante,
la
calidad
de
sus
productos
te
permite
degustar
un
generoso
bocadillo,
tanto
en
su
tamaño
como
en
el
contenido
del
entrepan.
Blanco
y
negro
con
pimientos,
chipirones
con
habas
y
ali
i
oli,
tortilla
de
patatas…
entre
otros
productos,
pueden
conseguir
un
potente
esmorzaret.
El
pequeño
recinto
de
este
establecimiento
no
permite
albergar
a
muchos
comensales.
En
un
local
de
cierta
antigüedad,
cuyo
regente
ha
heredado
hasta
el
nombre
del
anterior
propietario,
se
conservan
objetos
vintage;
esos
que
ya
solo
podemos
encontrar
en
algún
museo
de
artes
y
costumbres
populares
o
en
la
casa
de
la
abuela.
Amontonados
en
repisas
o
estantes;
podemos
ver
sin
arte
ni
concierto;
revueltos
entre
libros,
botellas
y
otros
objetos
inservibles:
aparatos
de
radio
de
los
años
treinta,
cajas
registradoras
antiguas,
máquinas
de
coser,
aspas
de
viejos
ventiladores…
y
todo,
echando
en
falta
la
ausencia
del
plumero
o
de
la
bayeta;
cubierto
de
polvo
y
telarañas,
causando
la
sensación
de
que
se
encontraran
en
un
desván
o
cuarto
trastero.
Llama
la
atención
una
máquina
a
modo
de
depósito
o
bomba
de
presión
anclada
en
la
pared,
que
en
su
día
sirvió
para
producir
agua
con
gas
y
que,
según
comentó
la
camarera,
se
sigue
utilizando
en
la
actualidad.
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Buidaolles
