1/5 Jennyfer S. 3 years ago on Google
Mi
segundo
tratamiento
comenzó
en
septiembre
del
año
pasado,
con
un
coste
de
casi
5000€.
Sin
embargo,
la
atención
al
paciente
en
esta
oportunidad
ha
ido
de
mal
a
peor.
Durante
el
confinamiento
no
hubo
ningún
tipo
de
seguimiento
por
parte
de
ningún
especialista.
En
el
mes
de
abril
me
correspondía
una
endoscopia
de
ajuste.
Llamé
la
semana
antes
para
preguntar
si
seguía
en
pie
la
intervención
y
me
dijeron
que
sí,
que
hiciera
la
dieta
de
preparación
sin
falta(una
dieta
bastante
extrema,
para
los
que
conocéis
de
qué
va
el
tema).
Al
ver
que
no
me
llamaban
para
darme
hora
volví
a
llamar
el
día
antes
de
la
endoscopia
y
es
ahí
que
me
dicen
que
no
se
realizará.
Tuve
que
llamar
YO.
Esto
no
hizo
más
que
empeorar
las
cosas
porque
desde
ese
momento
no
hubo
ningún
intento
de
contacto
por
parte
de
ellos
hasta
principios
de
agosto,
en
la
que
me
comentan
que
tengo
que
coger
hora
para
la
última
endoscopia,
y
también
me
dicen
que
tengo
que
hacerme
una
PCR,
por
requerimiento
de
Sanidad.
Hasta
ahí
no
hay
problema,
entiendo
los
protocolos
en
estos
momentos.
Pero
lo
que
no
es
de
recibo
es
que
la
tenga
que
pagar
yo,
porque
este
requerimiento
va
dirigido
a
la
clínica,
no
a
mi.
Después
de
decirles
por
activa
y
por
pasiva
que
no
me
niego
a
hacerme
la
prueba
pero
si
que
me
niego
a
pagarla,
es
que
recibo
una
llamada
del
“doctor”
Sorio,
quien
me
dice
que
la
única
forma
que
ellos
pagarían
por
la
PCR
es
si
llevaba
el
tema
a
lo
legal
(en
serio?!?!)
y
que
si
no
llevaba
la
prueba
con
resultado
negativo
el
día
de
la
endoscopia
sencillamente
no
me
la
harían.
Con
estas
amenazas
expresas
no
sólo
por
este
señor
sino
por
un
par
de
especialistas,
no
tuve
más
alternativa
que
pagar
los
130€
de
la
PCR.
Es
oportuno
mencionar
en
este
momento
que
para
los
nuevos
pacientes
que
se
hacen
el
mismo
tratamiento
que
yo,
la
PCR
la
realiza
GRATIS
la
misma
clínica.
Pero
claro,
como
ya
yo
había
pagado,
no
les
interesaba
ni
les
convenía
aplicar
el
mismo
trato
a
una
paciente
actual.
Lo
peor
del
tema
no
queda
ahí,
sino
que
el
día
antes
de
la
endoscopia
me
llaman
para
preguntarme
el
resultado.
Les
digo
que
es
negativo
y
me
dicen
que
para
poder
entrar
a
quirófano
debo
llevar
la
foto
con
el
resultado
del
laboratorio.
La
semana
pasada
voy
a
la
clínica,
entré
en
quirófano,
salí
del
quirófano,
llegue
a
casa,
y
nadie,
absolutamente
NADIE,
me
pidió
la
dichosa
foto.
Por
tanto,
lo
que
ellos
alegaban
que
era
un
requerimiento
del
Ministerio
de
Sanidad,
para
mi
pasó
a
ser
una
clara
muestra
de
mala
fe,
práctica
profesional
cuestionable
y
vergonzosa,
sin
mencionar
que
es
poco
ético,
ILEGAL,
y
por
ende,
DENUNCIABLE.
Pude
no
haberme
hecho
la
prueba,
no
hubiera
pasado
nada.
Pude
haber
dicho
que
era
negativa
sin
serlo,
no
hubiera
pasado
nada.
Lo
que
querían
era
perjudicarme
al
hacerme
pagar
más
pruebas
en
un
tratamiento
que
ellos
venden
como
“todo
incluido”.
Más
de
una
semana
ha
pasado
y
no
ha
habido
ningún
seguimiento
de
mi
caso,
si
me
encuentro
bien
o
no
después
de
la
intervención,
mucho
menos
ningún
intento
de
compensación
por
todas
las
prestaciones
que
estaban
incluidas
en
mi
tratamiento
que
no
se
me
proporcionaron
y
a
las
que
tenía
derecho
(repito
que
pagué
casi
5000€
por
esto),
y
que
casi
la
mitad
del
tiempo
no
se
realizaron
visitas,
ni
la
endoscopia
de
ajuste
a
los
6
meses.
Es
una
vergüenza
la
forma
como
tratan
a
sus
pacientes,
el
“doctor”
Sorio
no
puede
ser
más
déspota,
soberbio
y
arrogante.
Y
es
una
verdadera
pena
que
la
buena
labor
de
un
par
de
especialistas
se
vea
opacada
por
la
actitud
deleznable
y
repugnante
del
“médico”
que
les
dirige.
En
el
momento
que
le
deis
importancia
a
los
pacientes
como
lo
que
son,
y
no
como
clientes,
quizás,
y
solo
quizás,
puedan
ser
fieles
a
todos
valores
de
los
que
tanto
os
jactáis
en
las
redes
sociales
para
vender
más.
A
los
pacientes
actuales,
mirar
bien
que
no
os
estafen
como
a
mi.
A
los
pacientes
futuros,
pedir
todos
los
detalles
de
lo
que
os
ofrecen,
porque
muy
probablemente
les
cambien
las
condiciones
a
mitad
de
tratamiento,
y
no
habrá
vuelta
atrás.
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