5/5 Marina G. 1 year ago on Google
Este
pasado
domingo
tuve
el
placer
de
disfrutar
de
uno
de
los
regalos
probablemente
más
especiales
de
cumpleaños
que
he
tenido
desde
hace
mucho
tiempo,
una
experiencia
gastronómica,
concretamente
una
cata
de
vinos.
Casa
tradicional
reformada,
manteniendo
la
estructura
original
y
lo
más
importante,
manteniendo
la
esencia
de
su
historia.
Desde
que
pones
un
pie
en
el
lugar
se
respira
calma,
y
quedas
atrapado
en
un
ambiente
único
y
muy
especial
que
te
hace
desconectar
por
completo
de
mundo
que
dejas
fuera
al
cerrar
puerta.
Tras
trasladar
nuestros
gustos
y
preferencias
en
vinos,
ya
dieron
paso
a
crear
un
evento
increíble,
totalmente
personalizado,
en
el
que
no
faltó
detalle
alguno
y
todo,
absolutamente
todo
estuvo
no
solo
a
la
altura,
sino
muy
por
encima
de
lo
que
podíamos
pensar
o
imaginar.
Tuve
la
suerte
de
disfrutar
de
esta
experiencia
con
una
compañía
inmejorable,
siete
amigos
disfrutones.
Y
es
que,
aunque
ya
sabía
que
una
cata
es
la
mejor
excusa
para
disfrutar
con
amigos
mientras
aprendes
de
forma
original
y
divertida,
lo
corroboro.
La
experiencia
es
guiada
por
José
Luis
de
los
Reyes,
enólogo.
Jose
Luis
es
encantador
y
un
auténtico
profesional,
el
no
solo
guía
el
evento,
sino
que
es
quien
lo
crea
y
se
asegura
que
este
sea
un
éxito
garantizado.
Por
sus
conocimientos,
amabilidad,
delicadeza,
implicación,
entusiasmo,
experiencia
profesional
y
personal
consigue
generar
magia
en
un
enclave
singular,
magia
que
va
en
aumento
conforme
va
narrando
sus
interesantes
historias
con
las
que
logra
captar
plena
atención
de
todo
aquel
presente.
Ni
que
decir
tiene,
que
la
entrega
máxima
de
José
Luis
a
los
clientes
en
el
evento
es
posible
gracias
a
la
colaboración
de
Olga,
ella
es
quien
se
encarga
de
atender
y
servir
a
los
comensales,
una
chica
muy
profesional
y
encantadora,
con
una
sonrisa
atrapadora.
Ambos
muy
amables
y
profesionales,
juntos
hacen
que
te
sientas
especial,
que
te
sientas
como
en
casa,
juntos
forman
un
equipo
de
diez.
Sin
revelar
más
detalles
de
la
experiencia
para
que
todo
aquel
que
la
disfrute
pueda
vivir
en
primera
persona
esa
magia
de
la
que
hablo
y
tuve
la
suerte
de
disfrutar,
solo
puedo
decir
que
tanto
los
vinos
seleccionados
como
el
maridaje
que
le
acompañaba
estaban
realmente
buenos
y
que
parte
de
ellos
eran
de
elaboración
casera
directa.
Tanto
uno
de
los
vinos
tintos
que
degustamos
"su
niño",
como
parte
del
maridaje
(panes,
confitura,
queso,
carne)
eran
de
producción
propia
y
todo,
absolutamente
todo,
estaba
realmente
delicioso.
No
puedo
finalizar
este
post
sin
dar
las
gracias
por
el
detallazo
de
la
tarta
que
nos
pusieron
para
poder
soplar
las
velas
junto
a
mi
amiga
también
cumpleañera.
Si
todo
iba
de
diez
ya
con
esto
pusieron
la
guinda.
Y
es
que
cuando
lo
que
se
hace,
se
hace
con
amor,
cariño,
entrega
y
pasión,
eso
se
palpa
y
nada
puede
salir
mal.
Esto
permite
que
se
cree
un
espacio
y
ambiente
único,
esto
es
lo
que
ocurre
cuando
disfrutas
de
una
experiencia
en
@bebevinocatas.
Gracias,
gracias
y
gracias.
"Una
rica
experiencia
llena
de
manjares
exquisitos."
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