5/5 Cristina R. 3 years ago on Google
(Translated
by
Google)
A
CLASSIC
MALAGUEÑO.
Orellana
is
one
of
those
places
in
Malaga
that,
in
addition
to
having
good
food,
has
a
very
particular
charm.
They
have
as
many
tapas
and
very
good
portions,
and
with
an
excellent
product.
I
love
their
farolitos
(an
asparagus
wrapped
in
ham
and
with
a
delicious
cheese
sauce).
Also
its
crests,
its
pilpil
prawns,
sirloin,
flamenquín,
goat
hats,
stuffed
mushrooms
...
And
the
potatoes
"a
la
mala
leche"
are
tasty
and
spicy,
hey!
Hence
the
name,
of
course
...
Personally,
every
time
I've
tried
something
new,
I've
liked
it.
Anything
on
the
menu
is
worth
it.
And
it
already
depends
on
what
you
want
the
most:
whether
a
general
tapas,
fish,
meat,
Iberian
...
And
the
prices
are
very
good.
It
is
one
of
those
typical
places
that
I
like
to
take
people
who
come
to
visit
me
from
abroad.
It
seems
to
me
a
very
authentic
place
and
worth
knowing,
because
it
shows
you
a
lot
of
our
gastronomy,
our
lifestyle
and
our
character,
because
our
sympathy
and
good
humor
can
be
seen
in
its
staff
and
in
the
same
coexistence
that
exists
between
diners
.
A
nice
place
to
stand
and
drink
your
beer
or
your
wine,
while
enjoying
some
delicious
tapas,
talks
and
laughs.
Hopefully
COVID
returns
us
to
normal
one
day,
and
we
can
continue
to
enjoy
this
site
as
we
used
to.
Meanwhile,
we
adapt,
because
the
truth
is
worth
it.
(Original)
UN
CLÁSICO
MALAGUEÑO.
Orellana
es
uno
de
esos
sitios
que
tiene
Málaga
que
además
de
tener
buena
comida,
tiene
un
encanto
muy
particular.
Cuentan
como
muchas
tapas
y
raciones
muy
buenas,
y
con
un
producto
excelente.
A
mí
me
encantan
sus
farolitos
(un
espárrago
envuelto
en
jamón
york
y
con
una
salsa
de
queso
buenísima).
También
sus
crestas,
sus
gambas
al
pilpil,
el
solomillo,
el
flamenquín,
los
sombreritos
de
cabra,
los
champis
rellenos…
Y
las
patatas
“a
la
mala
leche”
están
sabrosas
y
pican,
¡eh!
De
ahí
el
nombre,
claro…
Personalmente,
cada
vez
que
he
probado
algo
nuevo,
me
ha
gustado.
Cualquier
cosa
de
la
carta
merece
la
pena.
Y
ya
depende
de
qué
tengas
más
ganas:
de
si
un
tapeo
general,
pescaito,
carne,
ibéricos…
Y
los
precios
muy
buenos.
Es
uno
de
esos
típicos
sitios
al
que
me
gusta
llevar
a
la
gente
que
viene
a
visitarme
de
fuera.
Me
parece
un
lugar
muy
auténtico
y
digno
de
conocer,
porque
te
muestra
mucho
de
nuestra
gastronomía,
de
nuestro
estilo
de
vida
y
de
nuestro
carácter,
pues
nuestra
simpatía
y
buen
humor
se
deja
ver
en
su
personal
y
en
la
misma
convivencia
que
hay
entre
comensales.
Un
sitio
simpático,
para
estar
de
pie
y
tomarte
tu
cañita
o
tu
vinito,
mientras
disfrutas
de
unas
tapitas
ricas,
de
charlas
y
de
unas
risas.
Ojalá
el
COVID
nos
devuelva
algún
día
a
la
normalidad,
y
podamos
seguir
disfrutando
de
este
sitio
tal
y
como
antes
lo
hacíamos.
Mientras
tanto,
nos
adaptamos,
porque
la
verdad
que
merece
la
pena.
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